En compañía por los bosques
Desde el brillo de sus ojos y su lagrimeo, va observando el mundo en una posición más inferior, que, ya sólo por su tamaño, se comprendería normal. Bajito, no muy agraciado en general, aunque dicen que es resultón, quizá por su forma de andar, como si llevara la alegría incorporada en su cadena de ADN. De buen carácter, entusiasta día a día a pesar de la férrea rutina en la que estamos metidos. No le importa, porque siempre disfruta del presente más inmediato, de lo pequeño y básico. Así, van pasando los años, sin poner pegas ni de dónde vive, ni a dónde viaja, ni hacia dónde pasea…No, sólo quiere que le traten bien, con eso se conforma y si alguna vez se ha equivocado, espera (antaño pícaro y más cercano en el tiempo, compungido) las consecuencias de sus actos. Fiel por naturaleza, siempre está ahí, observando lo que se necesita, para, sin palabras, darte la compañía, rozar su cuerpo para que le tengas a mano y así tener la grata sensación de la caricia, pudiendo emocionarse si te ve triste.
Un ser especial, el más especial de todos. Se hace digno de la confianza, mucho más que muchas personas, pues él nunca te abandonaría. Va por ti Jasper y todos los seres como tú que tanto bien hacéis. ¡Os merecéis lo mejor!
