Saldrá el sol un día.
Eso está seguro…
Y las nubes se moverán
entre el horizonte.
Viajarán los pájaros
por los continentes,
abrigando el anhelo
de una nueva oportunidad.
Tan seguro como
el amor certero
que te profeso:
eterno y sincero,
en el que me regodeo
afortunada
ante un glorioso amanecer.
¿Qué no te toco aún?
Lloverá como esta mañana
y no lo dudes,
escampará.
Y ahí estaremos, juntos,
manejando la vida.